Euri Cabral
Muchos seres humanos creen en Dios, pero no le creen a Dios. Para ellos existe un ser sobrenatural pero lo ven como algo que nada tiene que ver con sus vidas. Por eso no le creen y por tanto no tienen fe. La fe es un gran soporte para cada uno de los que creemos a Dios.
La Biblia dice con claridad meridiana en Hebreos 11:6 lo siguiente: “Pero sin fe es imposible agradar a Dios; porque es necesario que él que se acerca a Dios crea que le hay, y que es galardonador de los que le buscan”. La fe es esa firme convicción de que Dios es nuestro protector, nuestro galardonador, nuestro soporte, nuestra esperanza, nuestra guía en cada paso que damos. No importan las circunstancias por las que estemos atravesando, no importa cual sea el problema que nos esté afectando, ante todo eso la fe en Dios es el soporte fundamental para no naufragar en ninguna tormenta sin importar cual sea su magnitud.
En Hebreos 11:1 se dice que “la fe es la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve”, es decir, con fe es que podemos alcanzar los objetivos que buscamos conscientes de que tenemos un Padre Celestial que siempre estará con nosotros. La fe es la vía directa par la salvación, tal y como lo establece el apóstol Pablo en Efesios 2:9 “porque por gracias sois salvo por medio de la fe”. Es por eso que nuestra fe debe estar aumentándose de manera diaria, permanente y en especial en aquellos momentos donde las tribulaciones y los momentos difíciles nos están afectando. Y la mejor forma de aumentar nuestras fe es buscando la palabra y la orientación de Dios de manera permanente para que caminemos por el sendero que él nos traza. Dice la Biblia en Romanos 10:17 que “la fe es por el oír, y el oír por la palabra de Dios”.
Esos son los momentos para aumentar nuestras oraciones hasta el cielo sin desmayo, para creerle profundamente a nuestro Dios y pedir su misericordia y sus bendiciones. Dios es que todo lo suple, es el dueño de todo lo que hay en los cielos y en la tierra, él es quien nos llena y nunca nos abandona. Quien pierde la fe se aleja de Dios. Y quien se aleja de Dios esta expuesto a caer en pecado y a que las fuerzas del mal lo usen y lo afecten. Cuando sientes que todo se esta derrumbando es el momento de aumentar tu fe y pedir a Dios con la profunda certeza de que él no te va a dejar solo nunca. Y cuando le pidas a Dios debes hacerlo con la convicción de que él te dará en su tiempo, no en el tuyo.
Recuerda que quien no tiene fe no puede agradar a Dios, por eso la fe es el camino más directo y hermoso para encontrar todas las bendiciones de quien nos creo y nos permite alcanzar la salvación y la vida eterna a través de su gracia. Nunca te alejes de tu Dios grande y poderoso, y aumenta tu fe en el todos los días, todas las horas, todos los minutos y todos los segundos consciente de que “sin fe es imposible agradarle”.
Amados hnos.
Les felicito por este hermosa reflexión acerca de la FE, me gusto mucho porque comparto totalmente su comentario, he vivido experiencias muy fuertes en mi vida, en diferentes circunstancias (economia, salud, familia, morales, depresión) pero gracias a Dios cada vez mi FE fue en aumento y aumento, definitivamente si no fuera porque Dios es quien me ha sostenido a travez de su palabra, no seria lo mismo. «SIN FE ES IMPOSIBLE AGRADAR A DIOS» es necesaria para salir victorioso en Cristo Jesús en todas las tribulaciones que se nos presenten.
Por FE me declaró una mujer FUERTE y AMADA POR MI PADRE CELESTIAL.
Gracias hnos. Dios les siga llenando de SABIDURIA E INTELIGENCIA, para bendición de todos los hnos. lectores.
Amados hermanos.
Dios les bendiga en este gran trabajo que hacen al presentar este tipo de materiales para reforazar y edificar a nuestra amada Iglesia, pero me gustaría se considerara el siguiente comentario:
Mas bien es un texto a reflexionar: Dice el apóstol Santiago (2: 17-18b) «Así también la fe, si no tuviere obras, es muerta en si misma….yo te mostraré mi fe por mis obras.» Lo cual define con toda claridad el poner por obra La Palabra de Dios, es por eso que Cristo dijo: «No todo el que me dice: Señor, señor, entrará en el Reino de los cielos, mas el que HICIERE la Voluntad (Toda la Instrucción de Dios)de mi Padre que esta en los cielos.» Mateo 7: 21.
Dios les siga bendiciendo.