¿Cómo orar para que tus pedidos sean oídos?

Diác Juan Sánchez G.

Recibía periódicamente esta serie de artículos por correo web de una página judía. Que por desgracia han dejado de mandarlos.

El artículo se llama: Como rezar a Di-s

Aunque para nosotros hay una gran diferencia en el concepto de orar por el de rezar.

Y dice de esta manera, lo transcribo de forma integral de como lo recibí, para una mejor comprensión sobre el rezo y sus implicaciones personales, y al último daré mi opinión personal de lo que he comprendido.

El rezo personal a Dios, es decir las peticiones particulares de cada uno y las confesiones, es algo de carácter íntimo, eso es verdad, aunque también es cierto, que para que uno pueda hablar íntimamente con Dios para pedirle algo, necesita un clima especial y adecuado. Entonces, cuando ese clima está dado, uno aprovecha y habla íntimamente con Dios, y Dios responde.

Este clima adecuado se logra formando un grupo para rezar. Este grupo debe estar conformado por al menos diez varones judíos mayores de trece años.

Entonces, todos pronuncian al unísono alabanzas e himnos a Dios en voz alta, y luego, cada uno recita en silencio una plegaria especial llamada «Shemoná Esré» donde cada uno pide lo que necesita.

La finalidad del grupo es, porque muchas veces uno no está integro en el momento de acercarse a Dios para pedirle lo que necesita. Por eso, es probable que Dios no conceda nuestra pedido hasta que arreglemos nuestra falla.

Pero distinto es el caso cuando uno tiene una falla y se encuentra entre otras personas, en ese caso la misma no se notará, dado que se trata de uno de entre el montón.

Esto se debe a que seguramente los demás no tendrán la misma falla, por lo que gracias a ellos, uno pasa desapercibido, quedando nuestra falencia anulada ante la mayoría que no la presenta.

Además, a su vez, nosotros tendremos virtudes, que ayudarán a otros a pasar desapercibidos. Por eso, debemos decir que el «minián», o grupo de diez hombres o más, es útil para ser parte de un grupo durante el pedido, y no un ente individual, lo cual garantiza que Dios preste oídos al pedido de cada uno del grupo, precisamente por ser un grupo, por estar unidos.

Ahora bien, ¿para qué hace falta un rabino en ese grupo?.

Es porque si no hay un líder, cada uno consideraría sus propias necesidades, lo cual iría en perjuicio del grupo. Por ejemplo, aquel que debe ir a abrir su negocio, pediría que se apuren a terminar el rezo. Sin embargo, aquel otro que tiene su esposa enferma, pretenderá que la plegaria se prolongue para que en mérito de ello, el Todopoderoso se apiade y sane a su mujer.

Además, cuando se lee el rollo de la Torá, durante los días hábiles lunes y jueves, (como así en Shabat, las festividades y los ayunos públicos), todos pretenderían ser llamados para recitar la bendición previa a la lectura, y la posterior a la misma, y los días de semana son llamados solamente tres hombres.

Estas cuestiones que citamos son solo ejemplos, de las múltiples circunstancias que pueden darse para causar la ruptura de la armonía del grupo. O sea, la ruptura de la comunicación con Dios. Ya que Dios no atiende plegarias en medio de discordias.

Por eso, es importante que haya un rabino, él es el encargado de poner orden, implantar autoridad y respeto, y cuidar que el rezo se lleve a cabo en armonía y paz, para el bien del grupo en general, y de cada uno en particular.

Daniel Deshe

¡Qué curioso cómo se parecen a nuestros cultos de oración¡ sobre todo cuando alguien viene “de volada” porque después se va a trabajar.

En muchas congregaciones no saben cómo atraer a los congregantes a venir a orar, como si la oración fuera una carga o exigencia, sobre todo a través de los famosos desayunos después del culto de oración. Que terminan siendo solo una convivencia alimenticia y no espiritual.

La oración debería ser una necesidad del creyente, hay tres actividades que hacemos diariamente en nuestra vida: desayudar, comer y cenar y para algunos “los entremeses”–antes de—que por nada del mundo dejaríamos de hacer, pero no es así con la oración, la hemos abandonada en algunos casos, en otros la hemos llenado de “alabanzas, testimonios, solo 4 oración”, etc. Para así hacerla mas atrayente y llamativa.

En una palabra no fuerzan a ser creyentes y devotos a la oración, si pudiéramos mirar los efectos de la oración en la vida de los hombre de la biblia, nos daríamos cuenta cuanto hemos desperdiciado este potencial espiritual.

Quitemos los desayunos y veremos cuantos siguen viniendo a la oración, como que de repente todos se volvieron responsables de su trabajo, están cansados porque es el único día que se pueden levantar tarde, la convivencia familiar, o como alguien dice: el sábado es del Señor y el domingo de la señora.

¿Por qué tenemos que obligar a la congregación que asista a la fuerza para recibir bendiciones? ¿Por qué no mejor dejamos que ellos descubran su propia necesidad?

Hay una palabra hebrea que describe la actitud del devoto. Cavanah: concentración. Que nada impida la devoción, que nada obligue la armonía, que nada atraiga al alma sedienta de ser oída por su creador, más que su propia necesidad.

Hay una historia que contaba un rabino y decía así.

La oración no cambia las decisiones de Dios…pero si cambia a las personas y las prepara. . para poder así recibir las decisiones de Él.

Dios espera vernos más seguido de rodillas para así poder bendecirnos. . . no le interesa. . . venga es gratis y no hay que pagar nada.

1 Comentario

  1. Hector dice:

    Dios los bendiga esperemos que mas hermanos podamos ingresar y conocer esta informacion tan importante para nuestra vida y que los Pastores, Diaconos no dejen de publicar estos temas.
    A todos los que participan Dios les Bendiga y Oremos por los Enfermos y los necesitados

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