Hermanas y hermanos en la fé de Jesucristo:

Ante la incertidumbre causada por los recientes acontecimientos mundiales, que han afectado tres áreas específicas de la humanidad, a saber: su ambiente (desequilibrio en la temperatura), su economía (la recesión), y su salud (epidemia de influenza porcina), no podemos menos que reflexionar, tomar las medidas preventivas y precavidas pertinentes y accionar en la medida de nuestras posibilidades como una comunidad que no solamente cree en la intervención de Dios, sino que también acepta sus carencias y faltas que han contribuído a la materialización de esta crisis.

No se trata de ver estos eventos únicamente como círculos temporales que se tendrán que cerrar algún día, por citar a Eclesiastés 1:9; se trata de asumir la responsabilidad individual y colectiva que hemos involucrado en las decisiones de nuestro diario vivir. En este proceso reflexivo, quizá lleguemos a la conclusión de haber participado, en poco ó mayor grado ò tal vez por ignorancia ó abandono, en la inflamación que hoy sufre la creación visible e invisible de Dios (Colosenses 1:15-16), ésta que describe en Génesis, el libro del inicio de la vida.

Ambientalmente nuestro hogar, la Tierra, tiene fiebre y toda clase de síntomas de enfermedad porque la hemos contaminado con la maldad y la suciedad; financieramente, nuestra economía está inflada y enferma porque hemos sido egoístas y ambiciosos con «nuestro dinero», que hoy ya no vale tanto por cada gota de nuestro sudor; y qué decir de nuestra salud personal, que está quebrantada por no tomar en cuenta las leyes perfectas de Dios que regulan aún el tipo de comida que es SANA para nuestro organismo (ver Levítico 11:1-31) y lo relativo a su cultivo y crianza.

Debemos asumir que la humanidad hemos quebrantado la ley perfecta de Dios, lo que nos ha llevado a un estado de debilidad espiritual. Hoy es muy posible que una parte de la comunidad de la iglesia de Dios tenga temor de esta crisis.

Somos dados a evidenciar los males sólo cuando sus efectos tocan nuestras vidas.

Convoco a los miembros de la Sociedad Varonil y a las hermanas y hermanos de esta ciudad y de las iglesias del país para que OREMOS este próximo Viernes 1º de Mayo de 2009, a las 22:00 horas, presentando a Dios nuestro arrepentimiento y pidiendole al Señor Su intervención para terminar esta crisis local y mundial en las tres áreas: ambiente, economía y salud. En esta petición incluímos a las personas que han sido afectadas en alguna de estas áreas de sus vidas. La convocatoria incluye pasar rápidamente este correo a todos los hermanos de la iglesia de Dios (7o. día) que conozca.

Paz y bendición a todos

Atentamente

Juan Pedro A. O.
Director de la Sociedad de Varones
Iglesia de Dios (7o. día)
Templo Bethel
Querétaro, Qro.

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